Con la aceleración de la inflación de abril y mayo, cuando empezó a impactar la crisis de la disparada del dólar, los sectores de menores ingresos perdieron toda la recuperación del consumo que habían conseguido en los meses anteriores. Los datos surgen del relevamiento de la consultora Kantar Worldpanel, especializada en estudios de consumo masivo. Según el informe de Kantar, “el nivel bajo inferior –que nuclea el 17% de los hogares- había recuperado un 3% el volumen de consumo a lo largo del 2017, y otro 1% durante el primer trimestre 2018”. Sin embargo, en los meses de abril y mayo el consumo de este segmento de la población cayó 2%. “Las mejoras de cierre 2017 y principios 2018 se licuaron”, dice el informe.
Kantar elabora una pirámide que divide los distintos segmentos socioeconómicos según su escala de ingresos. El estrato de menores ingresos, llamado “bajo inferior”, incluye al 17% de los hogares, para los que el costo de la canasta básica de alimentos representa el 57% de sus gastos. Por lo tanto, apenas se disparan los precios, este sector de la población debe ajustar fuertemente sus consumos.
“Para afrontar las condiciones adversas, los hogares del nivel Bajo inferior achicaron el tamaño de sus compras, dejaron de visitar grandes superficies como hipermercados o mayoristas, y volvieron al punto comercial más cercano a su barrio: almacenes y en menor medida, a los autoservicios”, explica la consultora. En promedio -en cada visita al punto de venta-, adquirieron un 4% menos de cada categoría: “el tamaño de las compras no había caída en los últimos tres años, ni siquiera en 2016, y es una señal fuerte del impacto del contexto adverso de los últimos meses, donde los hogares se ven obligados a bajar la cantidad comprada para afrontar los incrementos de precios”, agrega. En términos de sectores, el principal ajuste en los últimos dos meses, se hizo en bebidas, en especial en las sin alcohol.
En la pirámide, el segmento siguiente, llamado “bajo superior”, representa al 33% de los hogares argentinos, y en este sector el peso de la canasta de alimentos es el 30% del presupuesto familiar. En un segmento más elevado de ingresos, que Kantar denomina “medio bajo” –el 28% de los hogares—la canasta básica se lleva el 15% de los ingresos del hogar. Mientras que el estrato “medio y alto” –22% de las familias—la canasta de alimentos solo pesa en un 7%.
Por su puesto que la estrateficación de la consultora es discutible, así como la denominación de cada sector. El economista Guillermo Olivetto, también especializado en consumo masivo, estimó el ingreso máximo que separa a un sector del otro. Así, el estrato más bajo serían familias con ingreso de hasta 11.500 pesos mensuales. En el siguiente, “bajo superior”, son hogares con ingreso de hasta $ 23.000 mensuales. En la “clase media baja” están los hogares con ingresos de hasta 41.000 pesos. Luego podría ubicarse una clase media y media alta –17% de la población– con ingresos de hasta 110.000 pesos. Y luego, solo un 5% de la sociedad, con familias de ingresos promedio de más de 200.000 pesos.