Con ventiladores y agua para palear el calor, las Madres de Plaza de Mayo de Hebe de Bonafini permanecieron toda la noche en una carpa frente a Casa Rosada.
Junto a una importante presencia de militantes kirchneristas, encabezaron la tradicional “Marcha de la Resistencia” que este año se tiñó con consignas de repudio al pedido de desafuero y detención de Cristina Kirchner, solicitado por el juez Claudio Bonadio, y con críticas al gobierno de Mauricio Macri.
Bajo un clima de feriado, con 34 ° a la sombra, el microcentro amaneció tranquilo. Un puñado de militantes de La Cámpora acampó en el lugar y se turnó durante la noche para no interrumpir las rondas ante la Pirámide de Mayo. Con botellas de agua se refrescaron el cuerpo.
En un carpa blanca, esta mañana se encontraba la presidenta de Madres, Hebe de Bonafini, quien ya había advertido al comienzo de la marcha: “Si la llevan presa a Cristina, se arma un quilombo que ni te cuento”. “Se turnan entre ellas pero marcharon toda la madrugada”, aseguraron miembros de la Asociación.