El tipo de cambio a 40 pesos, como cerró el viernes el dólar mayorista ($41,13 en el minorista), es el “segundo más alto de la era Macri”. El dólar más alto fue el de septiembre del año pasado en plena espiral cambiaria cuando llegó a casi 48 pesos a valores de hoy. Recordemos: ésta es la manera de comparar la cotización del dólar en distintos períodos históricos con la cotización actual. Para saber si el dólar hoy está "caro" o "barato" respecto del pasado, se toma la cotización de ese momento histórico y se le aplica la inflación que hubo desde entonces hasta hoy (*).
A inicios de septiembre del año pasado, el dólar mayorista cotizaba a 38 pesos. Desde entonces hasta febrero incluido la inflación acumulada (septiembre, 6,5; octubre, 5,2%; noviembre, 3,2%; diciembre, 2,6%; enero, 2,9%; febrero, 3,8%) fue del 26,7% (Aclaración: no se deben adicionar los índices de manera simple, porque la inflación se acumula sobre el período anterior). Así aquel dólar de 38 pesos equivaldría a un dólar de casi 48 pesos en marzo (ver cuadro con los cálculos de la consultora Macroview).
El tercer dólar más alto de la era Macri fue el inmediatamente posterior a la salida del cepo a fines de 2015: el dólar de febrero de 2016 (unos 14 pesos en el mayorista) equivaldría a 36,6 pesos de hoy. Ese dólar luego “cayó” al atrasarse frente a la inflación a 27 pesos de hoy en abril de 2017, un valor que no estaba muy lejos del dólar atrasado que dejó Cristina con Kicillof en noviembre de 2015 (el dólar de “9 pesos y pico” de aquel momento equivaldría a un dólar de 25 pesos hoy). No muy lejos, a su vez, del dólar súper atrasado de la convertibilidad, que hoy equivaldría a unos 23 pesos.
Por su puesto, el dólar a 40 de hoy es mucho más barato que el dólar “recontraalto” de la primera etapa de Néstor Kirchner (2003-2006), tras la megadevaluación de la salida de convertibilidad, cuando la economía crecía a tasas chinas, junto con las exportaciones y se creaba una gran cantidad de empleo. Ese dólar promedio de 3 pesos de los primeros años de Kirchner equivaldría hoy a un dólar de 66 pesos, si le aplicarámos la inflación desde entonces. Dicho de otro modo: hoy con 1 dólar se pueden comprar menos bienes y servicios en Argentina que en en aquella época, porque desde entonces los precios subieron más que el dólar.
Cuanto más tiempo se queda el dólar rezagado frente a la inflación, más lejano queda el dólar actual respecto al dólar real de otros períodos en el pasado. Por ejemplo, cuando hicimos el mismo cálculo en noviembre pasado, con el dólar alrededor de 39 pesos, el dólar de los primeros años de Kirchner a valores de ese momento (noviembre de 2018) equivalía a “sólo” 49 pesos (ver aquí).
“El tipo de cambio actual es un dólar relativamente caro (menos caro o menos competitivo para las exportaciones neto de los 3 / 4 pesos por dólar de las retenciones). Es caro aunque no prohibitivo: 41 / 42 pesos de hoy es un valor equivalente al que los argentinos atesoraron muchos dólares durante el conflicto con el campo (2008) y la crisis mundial (2009) o el dólar paralelo del cepo (2014 y 2015)”, dice el informe de Macroview. El dólar de 15 pesos del dólar paralelo de 2015 traido por inflación a valores actuales se acercaría a esos 41/42 pesos.
“El tipo de cambio real actual no está mal para la competitividad exportadora y para protegerse de la competencia importada. Por supuesto, habrá que seguir de cerca los próximos meses de la tasa de inflación y su impacto sobre los costos internos. Al mismo tiempo, es caro para atesorar y viajar al exterior pero no puede ser calificado de prohibitivo”, concluye el informe. Un dólar que frenó casi por completo el atesoramiento en dólares fue el dólar de 66 pesos a valores actuales de los primeros años de la era K, hoy irrepetible. Cualquier salto adicional del dólar quedaría licuado en términos reales porque trasladaría rápidamente a la inflación.
(*) Nota: Es una aproximación de lo que los economistas llaman el "tipo de cambio real bilateral" con Estados Unidos para medir la "competitividad" de la economía: a la cotización del dólar se le aplica la inflación local en el período y se le resta la inflación de Estados Unidos.