Con los últimos datos de precios, qué pasará con la “inflación reprimida” en 2021

Según el INDEC, la inflación de diciembre alcanzó el 4%, respecto de noviembre. El IPC-INDEC coincidió con las proyectado por las consultoras que participan del REM (Relevamiento de Expectativas del Mercado) del Banco Central. Marcó el registro mensual más alto de 2020. Así, la inflación acumulada de 2020 cerró en 36,1% .

Según lo informado por el INDEC, en diciembre la inflación fue de 4%, por encima del 3,2% de noviembre. La inflación promedio del último trimestre de 2020 se aceleró y alcanzó 3,7% mensual. La inflación del tercer trimestre de 2020 fue de 2,5%. Mientras que en los meses de mayor impacto de la pandemia (Abril- Junio de 2020 ), cuando la economía estaba totalmente paralizada, fue de sólo 1,7%.

En 2020, la inflación acumulada cerró en 36,1%, 17,7 puntos porcentuales por debajo de la inflación acumulada en 2019 (que llegó al 53,8%) .

Pese al descenso marcado de la inflación interanual, este número de inflación (36,1%) se da en contexto de una economía con un PBI que se derrumbó más de 10%, producto de la combinación de la pandemia y la cuarentena, con tarifas de servicios públicos “congeladas”, con programas de “precios máximos” para los productos de consumo masivo, un dólar oficial muy controlado con el cepo y la “puja salarial” acotada por el impacto de la mega-recesión.

Los componentes del número de inflación de 2020 tuvieron una dinámica muy heterogénea. Por ejemplo, la inflación de los bienes (IPC-Bienes) acumuló en el año 43%. Es decir, casi 7 puntos más que la inflación general. Mientras que el IPC-Servicios sólo subió 22,2%. Esta disparidad obedece a la gran cantidad de tarifas de servicios regulados que estan controladas o directamente “congeladas”.

Algo similar ocurre en la comparación de la inflación nucleo, los precios estacionales y los precios regulados. Mientras que la inflación núcleo alcanzo una variación de 39,4%, la de los precios estacionales subieron 64,4% y los precios regulados aumentaron solo 14,8%.

Esta distorsión en los precios relativos y las distintas “velocidades” a las que ajustan los precios son una medida de la “inflación reprimida”.Es decir, que en el futuro podrían tener un impacto inflacionario si se opta por corregir esas distorsiones.

El organismo oficial de estadísticas aclaró que no pudo relevar el 100% de los precios por la pandemia y las medidas de aislamiento: el mes pasado relevó el 97% cuando en abril había relevado sólo 77,5%. Además, el 70,9% de los datos fueron relevados por “contactos no presenciales” debido a la pandemia.

En diciembre, la inflación núcleo (que no incluye a precios regulados ni estacionales) fue de 4,9%, una tasa anualizada de 77,5%.  Esto es 0,9 puntos porcentuales por encima de la inflación general (4%). En 2020 la inflación núcleo acumuló una suba de 39,4%.   

Los rubros que más subieron en diciembre fueron: “Recreación y cultura” y “Salud” (5,2%);  “Transporte” (4,9%); Restaurantes y Hoteles” (4,6%) y “Alimentos y bebidas” (4,4%).

Contrariamente, los rubros “Comunicación”(0%), “Educación”(0%), “Bienes y servicios varios” (1,7%) y “Equipamiento y mantenimiento del hogar” (2,4%) reflejaron las menores variaciones respecto de noviembre.

En diciembre, la “inflación de alimentos” fue de 4,4% (0,4 puntos por encima de la inflación general), respecto de noviembre.

En el acumulado de 2020  la “inflación de alimentos” fue de 42,1%. Vale señalar que el 50% del presupuesto de las familias más pobres se destinan a la compra de alimentos.

El rubro de “Alimentos y bebidas” tuvo en diciembre una suba muy fuerte en “Carnes”. Los registros de  precios del Gran Buenos Aires reflejaron un aumento promedio del asado de 28,5% , nalga de 20% y cuadril de 19,3% mensual.

Las proyecciones de inflación para enero de 2021 es de 4% mensual, según la encuesta del REM del BCRA. Es un número elevado para el arranque del año teniendo en cuenta que el Presupuesto Nacional 2021 proyecta una inflación (punta a punta) de sólo 29% .

 Si se confirmara esa proyección de enero en la realidad, la inflación mensual no debería superar el 2% mensual el resto de los meses para poder cumplir con los números del Presupuesto.

Para 2021 las principales consultoras privadas esperan una inflación de 49,8% anual. Es decir que las expectativas de inflación para el próximo año están a 20,8 puntos de diferencia con las proyecciones del Presupuesto 2021 (29%).