Como se preveía, luego de la difusión de una segunda supuesta escucha telefónica, el juez federal Ariel Lijo procesó ayer al ex jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Oscar Parrilli por el también supuesto delito de encubrimiento agravado de Ibar Pérez Corradi, quien fue detenido en junio de 2016 tras estar prófugo 4 años en el marco de la causa por el triple crimen de General Rodríguez.
El magistrado consideró que Parrilli, en su carácter de director de la AFI, cargo que asumió luego de ser secretario general de la Presidencia, ocultó los informes producidos por la Dirección de Contrainteligencia de ese organismo para colaborar con que el entonces prófugo Pérez Corradi eludiera a la Justicia en Paraguay, donde estuvo oculto. En su resolución, Lijo consideró que en 2015 el entonces jefe de Inteligencia omitió elevar a los fiscales datos precisos del paradero del prófugo, obtenidos por dos agentes por él designados para esa tarea.
“Parrilli sabía dónde estaba Pérez Corradi y no se lo comunicó a nadie”, afirmó Lijo ayer en Radio Nacional. Según la denuncia, el ex funcionario cristinista no solo tenía información de que el prófugo se había casado en Paraguay con Gladys Delgado, sino que además ya lo habían identificado.