Argentina ya pagó 17.000 millones de dólares en juicios internacionales a holdouts, compensaciones por expropiación de empresas – YPF- y fallos adversos en el CIADI, el tribunal arbitral del Banco Mundial. Además acumula otros litigios internacionales que podrían terminar en fallos adversos por un total de otros 4.500 millones de dólares, incluidos los juicios todavía abiertos por la expropiación de YPF y por la manipulación del cálculo el PBI (Indec) que alteraba los pagos de los bonos Cupon PBI, entre otros. Así surge de un informe realizado por Fin.guru.
Desde el 2001, Argentina ha tenido fallos adversos en los tribunales internacionales (CIADI- Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones). Una parte como consecuencia de la “pesificación” de los contratos (en dólares) firmados con empresas multinacionales que llegaron al país en los años ’90, en medio de un fuerte proceso de privatización de las empresas servicios públicos.
La salida de la crisis 2001/2002 se dio con un “quiebre jurídico” en los contratos a los cuales las empresas multinacionales reclamaron en los tribunales internaciones. Y tras varios años de juicios , ida y vueltas, van teniendo fallos favorables. Luego llegan al Gobierno de turno con enormes cuentas a pagar.
Sin embargo, más de U$S 20.000 millones de una cuenta total de U$S 21.600 millones corresponden a expropiaciones, quita de concesiones y juicios iniciados durante la era K. Hoy el país tiene abiertos varios litigios por incumplimiento del derecho internacional en los procesos de nacionalización y expropiación de empresas.
Tales son los casos de Aerolíneas Argentinas e YPF. También el país ha pagado enormes cifras por el conflicto con los holdouts ( titulares de bonos que no ingresaron a los canjes de deuda 2005 y 2010). Y más recientemente, hay juicios por la manipulación de índices oficiales de estadística que redujo el pago de los bonos atados al PBI durante la intervención del INDEC de Guillermo Moreno.
Según el informe elaborado por Sebastián Maril, CEO de Finguru, sólo por el conflicto con los holdouts se pagó en efectivo 9.600 millones de dólares. Por la expropiación de YPF se "pagaron" 5.800 millones de dólares mediante la emisión de títulos públicos que en realidad se están pagando actualmente (Bonar 2020, Bonar 2024 y Discount 2033). Mientras que por los juicios en el tribunal internacional del Banco Mundial (CIADI -) varios casos por U$S 1.105 millones entre 2013 y 2017. Es decir, solo por estos litigios Argentina afronto pagos por 16.505 millones de dólares (ver cuadro). Para reflejar la magnitud de estos desembolsos es el equivalente a un cuarto de las reservas brutas actuales del BCRA.
La reestatización de Aerolíneas Argentinas se inició durante el Gobierno de Cristina de Kirchner en diciembre de 2008. Posteriormente el Grupo Marsans inicio un litigio contra la Republica Argentina, cuyos derechos fueron vendidos a Burford Capital, una compañía dedicada a comprar juicios contra empresas y gobiernos para luego cobrar sumas multimillonarias. Por eso se la suele asociar en la misma categoría de los llamados “fondos Buitres”.
También Burford compró los derechos de Petersen Energía S.A.U. y Petersen Inversora S.A.U. en el caso contra la República Argentina y contra YPF, luego de la expropiación a Repsol en el año 2012, también en el segundo mandato de Cristina. En ese juicio reclaman ahora más de U$S 1.600 millones.
