A Sturzenegger no lo acompañó la fuerza

a-sturzenegger-no-lo-acompa-la-fuerza-2018-11-21

Ayer Federico Sturzenegger fue nombrado miembro de número de la Academia de Ciencias. Como es usual, quien es honrado tiene que presentar una o varias de sus contribuciones. Sturzenegger, que cuenta con una larga carrera académica, eligió dos temas que marcaron su carrera: el impacto de la elección de los regímenes cambiarios en la macro (trabajos que hizo en su mayoría en colaboración con Eduardo Levy Yeyati) y la “materia oscura” (junto a Ricardo Hausmann) como una interpretación benigna del déficit de cuenta corriente de los EEUU previo a la crisis de 2008.


Además el ex presidente del BCRA eligió reflexionar sobre su paso por la función pública, las enseñanzas en término de política económica y el rol de la comunicación. Acá es donde su presentación se pone picante. Se queja Sturzenegger: “fue en este contexto que el gobierno a fin del año 2017 decidió hacer un giro abrupto de su política económica subiendo las metas de inflación” y relajando la política monetaria ¿Por qué? En su interpretación “se había llegado a esa discusión después de una desgastante puja que había durado 6 meses entre el BCRA y el Ejecutivo. El Ejecutivo necesitaba más inflación para poder cumplir mejor su meta fiscal, además de buscar una política monetaria más laxa”.


Es decir que a menos de un año de su salida del banco central, Sturzenegger decide blanquear lo que entonces se decía en voz baja: Marcos Peña y otros miembros del gobierno no apoyaban sus políticas y querían cobrar más impuesto inflacionario para hacer menos ajuste fiscal. Esa es la razón, para Sturzenegger, de la disparada del tipo de cambio y el derrumbe del precio de los activos en pesos. Y no ahorra críticas: “el debilitamiento institucional continuó agravándose durante el año” y la crisis internacional “encontró al país con una institucionalidad monetaria debilitada”.


Las declaraciones de Sturzenegger terminan por enterrar el mito de que el gobierno de Macri es una gestión consistente que sufrió los embates de un mundo más complicado. En la interpretación del primer presidente del banco central de Cambiemos, el mundo empeoró pero la Argentina se equivocó antes y aumentó su fragilidad.


Pero ¿realmente el gobierno quería cobrar más impuesto inflacionario en lugar de hacer el ajuste? El único margen propio para hacer ajuste en un año electoral era derrumbar la obra pública como se está haciendo ahora y seguir.en plena campaña electoral con mayores tarifazos. Dado que era una opción impopular, el error fue potenciar el atraso cambiario planchando la cotización del dólar y potenciando la bicicleta financiera (conocido en jerga como “carry trade”).


Sturzenegger era el único economista al que no le preocupaba la disparada del déficit de cuenta corriente y el atesoramiento de dólares, señales inequívocas de un fuerte atraso cambiario. El doctor de Harvard vivía en el universo de los jedis y le decía a quien quisiera escucharlo que en Argentina había una revolución de.productividad subterránea que sostendría un boom exportador y el crecimiento por muchos años, y sin tener que devaluar como en el pasado. Exhibía orgulloso  sus maquetas de Star Wars y sentenciaba que “la economía de Bein y Melconián no existe más, siempre hablando de atraso cambiario y déficit de cuenta corriente conceptos del pasado", enfatizaba creyente, con los ojos cerrados. Tal es su admiración por la saga épica del espacio que Sturzenegger cerró su presentación citando el momento de Star Wars en el que Obi-Wan Kenobi aconseja al joven Luke Skywalker: “Tus ojos pueden engañarte, no confíes en ellos”.