Al igual que en el resto de los años de crisis en argentina (2002, 2009 y 2019), el mix de recesión y el derrumbe de importaciones, generarán un superávit comercial récord. Por la crisis del “Covid-19” el saldo de la balanza comercial se encamina a alcanzar un total de u$S 18.000 millones en 2020. Sin embargo, el BCRA no logrará acumular reservas.
Según el INDEC, en junio se acumuló un superávit comercial de u$s 1.484 millones, como consecuencia de una baja de las exportaciones (-8,6% interanual) menor a la caída en las importaciones (-20,8% interanual) por el impacto de la cuarentena y el efecto Covid-19 que profundizó la recesión.
Dentro de las exportaciones, en junio se destaca el incremento de 46,3% de productos primarios, en relación a igual mes del año pasado. Mientras que los rubros de importaciones que registraron mayores caídas fueron : “Vehículos automotores de pasajeros” (-53,8%) y “Combustibles” (-50,6%), siempre comparando con igual mes del año pasado.
En lo que va de 2020, el superávit comercial acumula U$S 8.097 millones. El país le vendió al resto del mundo por U$S 27.388 millones y realizó compras por U$S 19.291millones.
Las exportaciones en el primer semestre de 2020 amortiguaron el impacto de la pandemia y cayeron “sólo” 11% respecto del mismo período de 2019. Mientras que las importaciones se derrumbaron un 23,3%, comparando con el primer semestre del año pasado.
En los años de crisis económicas (locales e internacionales), Argentina acumuló siempre los mayores superávit comerciales. En el año 2002 , tras la mega-devaluación del estallido de la Convertibilidad, el superávit comercial llegó a U$S 16.600 millones. En 2009, con el impacto de la crisis internacional, el superávit comercial ascendió a U$S 16.885 millones. En 2019. tras la crisis cambiaria iniciada en 2018, el saldo comercial alcanzó U$S 15.990 millones.
En 2020 , si en el segundo semestre se mantiene la caída de exportaciones cercana al 10% interanual y las importaciones se ubican entre un 12,5%-15% por debajo del mismo periodo de 2019, nuestro cálculo es un saldo comercial cercano a los U$S 18.000 millones.
El punto clave es que pese a tamaña generación de dólares via balanza comercial y al “super cepo”, que cada vez es más restrictivo para empresas (especialmente importadores) y para personas físicas, el Central no logra comprar los dólares del superávit comercial.
Vale señalar que la última medida del BCRA incrementó las restricciones a las transferencias bancarias en dólares para evitar a la operatoria de “coleros digitales “ del cupo de u$S 200 mensuales de “dólar solidario”.
Durante el primer semestre del año, el BCRA solo pudo comprar u$S 105 millones en el mercado de cambios. Es decir, apenas el equivalente al 1,2% de los dólares del saldo comercial.
En noviembre de 2019, primer mes de la vigencia del “ súper cepo” (de 200 dólares mensuales), el Banco Central compró u$s 2.202 millones al sector privado. Mientras que el saldo comercial de ese mes fue de u$s 2.484 millones. Es decir, se quedó con el equivalente al 88% de los dólares del saldo comercial.
En diciembre de 2019, el Central compró en el mercado cambiario u$s 1.121 millones, equivalente al 50% de los dólares generados por el comercio exterior (ver gráfico). En cambio, en abril pasado, con más de U$S 1400 millones de superávit comercial, el Central debió vender U$S 547 millones para frenar una suba mayor del tipo de cambio oficial. En mayo pasado, el superávit comercial acumulado alcanzó 1.893 millones de dólares, pero el BCRA tuvo que vender otros U$S 679 millones para evitar una disparada del tipo de cambio oficial.
En junio, el Central volvió a comprar dólares por la aplicación del “súper cepo” a las importaciones,– despues de 2 meses con posición vendedora en el mercado de cambios- . Logró comprar u$S 672 millones. Es decir, el equivalente al 45% del saldo comercial del mes.
Sin embargo, en julio, pese a todas las restricciones a la compra de dólares, el Central ya vendió (hasta 23/07) u$s 391 millones.
La indefinición en la renegociación de la deuda, las mayores regulaciones en el mercado de cambios y la falta de un plan de mediano plazo por parte del Gobierno, alimentan las expectativas de devaluación. Todos quieren “sacarle” dólares al BCRA al tipo de cambio oficial (o al “dólar solidario”) y nadie quiere venderle sus dólares.
Cada vez más personas físicas compran mensualmente el cupo de u$S 200 mensuales. En tanto, los importadores intentan adelantar compras al exterior al “dólar oficial”. Mientras los exportadores retienen las liquidaciones de los dólares ante la expectativa de una nueva devaluación.
En resumen, en 2020, la pandemia y las medidas de aislamiento derrumbarán la actividad económica y las importaciones. Así se producirá una récord histórico de superávit comercial (cercano a los u$S 18.000 millones).
Sin embargof, hasta que no cambien las expectativas con un plan que recupere la confianza, tendremos la paradoja de un “sobrante” de dólares “genuinos” inédito producto del comercio exterior y muy pocos dólares en las reservas del BCRA.