Daniel Scioli avanza hacia las elecciones de octubre confiado como nunca en el sendero de su lancha.
Mientras el candidato del Frente para la Victoria aparece arriba en todas las encuestas, el peronismo y la oposición ya discuten qué papel jugará Scioli sin finalmente llega a la Presidencia.
En la vereda del antikirchnerismo, ni Mauricio Macri ni Elisa Carrió tienen dudas.
La jefa de la Coalición Cívica asegura que existe un pacto: si gana, el gobernador bonaerense se dedicará a viajar por el exterior y el gobierno será ejercido por Carlos Zannini y la agrupación juvenil La Cámpora.
Los vaticinios de la oposición son desmentidos por todo el arco del peronismo.
Los intendentes del conurbano bonaerense y los gobernadores del PJ afirman que Scioli tomará las decisiones y hará valer su conducción.
El abanderado de esa postura es Juan Manuel Urtubey, el mandatario provincial reelecto en Salta.
El gobernador salteño no es el único que apuesta por el liderazgo de Scioli. La mandataria electa de Tierra del Fuego Rosana Bertone piensa lo mismo. La sucesora de Fabiana Ríos anunció que va a ser la “más sciolista” de los gobernadores.
El respaldo de los caciques del PJ para Daniel incluye a dirigentes del no kirchnerismo, como José Manuel De la Sota: el rival de Sergio Massa en la interna de UNA aseguró que –si Scioli gana las elecciones- el peronismo se va a encolumnar detrás suyo.
Si cumple con su sueño de llegar a la Casa Rosada, Scioli ¿será títere o verdugo del kirchnerismo?