El jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas, ingresó esta tarde en la Casa de Gobierno y se dirigió a la zona del despacho presidencial junto a dos colaboradores, tras la denuncia que recibió en su contra por presuntos vínculos con el caso de corrupción “Lava Jato” de Brasil.
Arribas regresó hoy de sus vacaciones en Brasil y se esperaba que presente la documentación que certifique el origen del dinero que recibió de un operador financiario condenado pago de coimas del gigante constructor Odebrecht.