Los números reales de las reservas, el “salvataje” de China y la herencia para el próximo Gobierno

La dinámica de ventas de dólares del BCRA se profundizó en el arranque de 2023 y deterioró fuertemente el stock de reservas brutas y netas. A la liquidación anticipada de dólares via  Dólar Soja l y ll (en septiembre y diciembre de 2022)  se le sumo el impacto de la sequía con una caída más de U$S 24.000 millones de dólares en las exportaciones. Esto obligó al BCRA a continuar endureciendo el cepo importador y también a activar la búsqueda de dólares para engrosar las reservas brutas (activación de Swap con China y deuda con organismos internaciones) anticipándose a un segundo semestre con una sequía de dólares en pleno proceso electoral. El cepo importador fue tan restrictivo que incrementó la deuda del BCRA con importadores y a esto se suma la activación del Swap con China por U$S 10.000 millones, un préstamo de corto plazo (1 año) de magnitud con el gigante asiático.

El BCRA arrancó el año con una pérdida de reservas preocupante. En lo que va del año acumula ventas por U$S 2.062 millones (llegó estar 3.500 millones en terreno negativo en abril). En mayo, con el incentivo del “dólar agro” el BCRA pudo acumular reservas U$S 852 millones. Y la dinámica para adelante es más preocupante aún,. ya que en los años electorales entre agosto y noviembre el Banco Central vende en promedio U$S 4.500 millones.

Las reservas netas (descontando el swap Chino, encajes de depósitos en dólares, préstamos de Banco de Basilea y DEG) se ubican en 1.460 millones en negativo. Vale señalar que en el arranque de la gestión de Alberto Fernández había más de U$S 11.500 millones de reservas netas.  Además, las reservas brutas han tenido una caída record de U$S 11.585 millones en los primeros 5 meses del año, producto del pago de deuda con acreedores privados, ventas netas de dólares en el mercado del dólar oficial, intervención en el mercado de los dólares y por caída de los encajes bancarios.

Este “drenaje de dólares” se da en un contexto de mayores restricciones a las importaciones. Ya desde junio de 2022 , previo a la salida de Guzmán, el BCRA comenzó a profundizar el cepo importadores y desde la salida de las SIRAS (con la gestión de Massa) las autorizaciones de importaciones están muy trabadas y se liberan muy pocos dólares. Sin embargo, el BCRA continúa con la pérdida sistemática de reservas

Ante este panorama de incertidumbre, Sergio Massa y Miguel Pesce (titular del BCRA) aceleraron la activación del swap con China por U$S 5.000 millones (el total del swap es de U$S 19.000 millones) en enero pasado y un otros 5.000 millones ahora. En total, U$S 10.000 millones de libre disponibilidad en yuanes, para pagar importaciones chinas. China es el principal proveedor de la Argentina, con importaciones anuales por más de U$S 17.000 millones anuales con ese origen y un déficit récord en la balanza comercial bilateral de U$S 9.000 millones en el último año. Las importaciones que se pagan con yuanes, liberan obviamente dólares para pagar otras importaciones o intervenir en el mercado cambiario. El BCRA también podría, como se hizo en el pasado, efectuar una operación de canje de los yuanes por dólares, pero por ahora no fue anunciado.

Según la Secretaria de Comercio, ya existen SIRAs autorizando importaciones con yuanes por un equivalente a U$S 2.157 millones de dólares (15.000 millones de yuanes), hasta medidos del mes pasado.

Una vez activados los yuanes, se activa un préstamo con un plazo en principio de un año. En este caso, este el acuerdo firmado por el BCRA y el Banco  Popular de China paga tasa Shibor (actualmente en 2,4%) más 400 pb. Es decir, el costo es de 6,4% anual.

Por el lado de la demanda de divisas existen factores continuarán afectando negativamente a las reservas del BCRA hasta fin de año.

-Pagos de deuda (FMI organismos internacionales y pagos de intereses deuda pública en dólares). Los desembolsos del FMI están “matcheados” con los pagos de capital e intereses con el organismo. Entre junio y diciembre vencen cerca de 10.200 millones de dólares.

-Demanda de dólar ahorro y dólar tarjeta. Se estima una demanda de 600 millones mensuales (150 millones de dólar ahorro y 450 millones de dólar tarjeta)

-Pago de deuda de provincias y obligaciones negociables. En este caso el BCRA  limitó esta semana el acceso a las provincias al mercado de cambios oficial para los vencimientos en lo que resta del año .La autoridad monetaria solo le girará el 40% de los dólares (al dólar oficial) que vencen en 2023. Por el 60% restante, deberán aportar dólares propios, conseguir fondeo o renegociar con sus acreedores. Las provincias afrontan vencimientos hasta fin de año por U$S 460 millones. Pero el BCRA solo les liberaría unos 192 millones, por lo cual la entidad monetaria se ahorraría menos de U$S 300 millones. Otro indicador de que se viene un “cuidado extremo” de los dólares.

Lo más preocupante no es solo flujo de divisas que se demandan mensualmente sino también la acumulación de stock de deudas en dólares para la próximo Gobierno.

El diferencia entre las importaciones devengadas (base INDEC) y pagadas (base MULC) refleja la deuda comercial del BCRA con importadores. Entre junio de 2022 y abril de 2023, se acumularon deudas con importadores por un total de U$S 12.700 millones.

  • A lo que hay que sumar lo que se utilice de los U$S 10.000 millones del préstamo con China (por la activación del SWAP de monedas), que corre por un carril paralelo ya las nuevas SIRA que se están aprobando desde hace un mes con yunes se pagarán en los próximos meses (60 días, 90 días, etc.) dependiendo de cada sector.
  • Además, habrá que ver si el anuncio de que Argentina se sumará como socio del Banco de los BRICS en agosto (junto a Arabia Saudita, Zimbagwe y Egipto) llega a efectivizarse en el financiamiento de importaciones provenientes de Brasil por parte de entidades bancarias de ese país. En ese caso se sumaría una deuda comercial adicional.

En resumen, el “Plan llegar”  está bajo stress y necesita de un “puente de dólares” para llegar primero a la PASO de agosto y después a octubre ( y noviembre si hubiese “balotaje”). Massa no tiene otro “conejo” por sacar, la sequía de divisas es muy profunda. La deuda en dólares que quedará para la próxima administración, solo por deuda con importadores y swap con China, podría sumar más de U$S 20.000 millones. El argumento oficial es que el año próximo, el próximo Gobierno contará con muchos más dólares disponibles sin sequía y por el ahorro de dólares y/o exportaciones de gas y petróleo de Vaca Muerta funcionando a pleno.