En 2017 la economía creció, según el Indec, 2,8%, después de una caida del 2,3% el año previo, y también se recuperó el mercado laboral. Según los datos oficiales que surgen del Sistema de Previsional, durante el año pasado se crearon más de 350.000 empleos, un crecimiento del 2,9%, más del doble del crecimiento poblacional, que se estiman alrededor del 1,1% anual.
Cuando se desagregan las cifras está claro que no todo luce tan bien. Los puestos de trabajo "asalariados privados" crecieron sólo de 1,7%, unos 108 mil empleos más. Son los empleos formales más estables, mejor remunerados y con todos los derechos laborales: aguinaldo, vacaciones pagas, obras social, etc. En cambio, los monotributistas crecieron 9,8%, unos 142 mil empleos registrados más. Mientras que el empleo público (incluye Nación, provincias y municipios) tuvo un alza de 3,6% , 106 mil puestos más, en el año electoral. Por su parte, los monotributistas sociales (categoría más baja) crecieron casi 19% y ya llegan a 419 mil. En tanto, el registro de empleadas domésticas creció 6,7%.
El economista Federico Muñoz maneja otras cifras, pero confirma la tendencia. "La economía retornó al crecimiento, pero el mercado laboral (en particular, el empleo en relación de dependencia) no termina de ganar dinamismo", dice en el último informe de su consultora. De hecho, recién en noviembre del 2017 el número de asalariados privados logró recuperar el terreno perdido en la recesión de 2016 y equiparar al nivel de noviembre de 2015", agrega.