Según el INDEC, en julio se acumuló un superávit comercial de u$s 1.476 millones, como consecuencia de una baja de las exportaciones (-16,3% interanual) menor a la caída en las importaciones (-30,1% interanual) por el impacto de la cuarentena y el efecto Covid-19 que profundizó la recesión. Así, en los primeros 7 meses del año el superávit comercial acumulado llegó a U$S 9.573 millones. Sin embargo, el BCRA no logra comprar dólares para robustecer, al contrario sigue vendiendo para evitar una depreciación más rápida del tipo de cambio oficial.
Dentro de las exportaciones, en julio todos los rubros cayeron respecto al mismo mes del año pasado. Los “productos primarios” cayeron 10%, las “manufacturas de origen agropecuario” disminuyeron un 9%, las manufacturas de origen industrial se derrumbaron 32,3% y “combustibles y energía” cayeron 20,3% , todas respecto a julio de 2019.
Por el lado de las importaciones la evolucio fue la siguiente: “Combustibles y lubricantes” (-54,8%); “Vehículos automotores de pasajeros” (-51,6%) ; “Piezas y accesorios para bienes de capital” (-50,9%) , Bienes de capital (-24%) y Bienes de consumo (-16,7%), siempre comparando con igual mes del año pasado.
En lo que va de 2020, el superávit comercial acumula U$S 9.573millones. El país le vendió al resto del mundo por U$S 32.291 millones y realizó compras por U$S 22.718 millones.
Las exportaciones en los primeros 7 meses del año amortiguaron el impacto de la pandemia y cayeron “sólo” 11,9% respecto del mismo período de 2019. Mientras que las importaciones se derrumbaron un 24,4%, comparando contra mismo período del año pasado.
En los años de crisis económicas (locales e internacionales), Argentina acumuló siempre los mayores superávit comerciales. En el año 2002 , tras la mega-devaluación del estallido de la Convertibilidad, el superávit comercial llegó a U$S 16.600 millones. En 2009, con el impacto de la crisis internacional, el superávit comercial ascendió a U$S 16.885 millones. En 2019 tras la crisis cambiaria iniciada en 2018, el saldo comercial alcanzó U$S 15.990 millones.
En 2020 con esta tendencia de las exportaciones y derrumbe de importaciones producto de la pandemia estimamos un saldo comercial cercano a los U$S 18.500 millones.
A pesar de un récord en la generación de dólares via balanza comercial y al “super cepo”, que cada vez es más restrictivo para empresas (especialmente importadores) y para personas físicas, el Central no logra comprar los dólares del superávit comercial.
Vale señalar que en las últimas semanas en el BCRA analizaron la posibilidad de cortar el cupo de cupo de u$S 200 mensuales del “dólar ahorro”.
Con datos hasta el 19 de agosto, el BCRA lleva acumuladas en el año ventas netas por U$S 1.240 millones.
En noviembre de 2019, primer mes de la vigencia del “ súper cepo” (de 200 dólares mensuales), el Banco Central compró u$s 2.202 millones al sector privado. Mientras que el saldo comercial de ese mes fue de u$s 2.484 millones. Es decir, se quedó con el equivalente al 88% de los dólares del saldo comercial.
En diciembre de 2019, el Central compró en el mercado cambiario u$s 1.121 millones, equivalente al 50% de los dólares generados por el comercio exterior (ver gráfico).
En cambio, en el primer semestre de 2020, con más de U$S 8.090 millones de superávit comercial, el Central logró comprar solo U$S 105 millones.
Para lograr este objetivo en junio el BCRA aumentó las restricciones cambiarias con el “súper cepo” a las importaciones .Y después de 2 meses con posición vendedora en el mercado de cambios- logró comprar u$S 672 millones. Es decir, el equivalente al 45% del saldo comercial del mes.
Sin embargo, en julio, pese a todas las restricciones a la compra de dólares, el Central vendió u$s 568 millones. A pesar de tener un saldo comercial de u$S 1.476 millones. Mientras que las ventas en hasta hasta el día 19 (último dato oficial) sumaban U$S 780 millones.
La falta de un plan de mediano plazo por parte del Gobierno, alimenta las expectativas de devaluación. Todos quieren “sacarle” dólares al BCRA al tipo de cambio oficial (o al “dólar solidario”) y nadie quiere venderle sus dólares.
Cada vez más personas físicas compran mensualmente el cupo de u$S 200 mensuales. Probablemente en agosto sean mas de 4 millones de personas. En tanto, los importadores intentan adelantar compras al exterior al “dólar oficial”. Mientras los exportadores retienen las liquidaciones de los dólares ante la expectativa de una nueva devaluación.
En resumen, si en algún momento el Gobierno puede recobrar la confianza, los “dólares genuinos” del saldo comercial deberían robustecer las reservas del BCRA . Pero sin credibilidad y sin plan, pese a tener un récord de 18.500 millones de superávit comercial en el año, al BCRA le faltarán dólares.