La exigencias del FMI: reducir fuerte en 18 meses el déficit fiscal total

la-exigencias-del-fmi-reducir-fuerte-en-18-meses-el-dficit-fiscal-total-2018-05-11

El staff técnico del FMI, encabezado para el caso argentino por el economista Roberto Cardarelli, se plantó en la negociación con el ministro Nicolás Dujovne. Quieren fijar metas sobre el déficit fiscal total (incluidos intereses de la deuda), en lugar de las metas sobre el déficit primario (gasto menos recaudación) que hasta ahora sostenía el Gobierno argentino.
La postura de los técnicos del organismo es que Argentina debería reducir su déficit total de los actuales 5 puntos del PBI a 3% del PBI en los próximos 18 meses. Ello supone achicar en unos U$S 12.000 millones el déficit (casi 280.000 millones a valores actuales), que para este año se proyectaba en unos U$S 30.000 millones.
 Quieren, además, realizar un estricto monitoreo trimestral de las metas.
  Negocian un stand-by de alto acceso, que podría cerrarse en las próximas 6 semanas, por un monto que podría rondar los U$S 20.000 millones. Aunque el Gobierno confía en que la negociación política con Washington y los principales países del G-20 destrabar en el Directorio del organismos un préstamos por un monto mayor. Además, negocian fondos adicionales con el Banco Mundial y el BID, los otros dos organismo con sede en Washington, "primos" del FMI. Y buscan cerrar un acuerdo con tres bancos privados para que aporten otros U$S 3.000 milloens, bajo la forma de "Repos", un línea para fortalecer las reservas del Banco Central.
  La propuesta de los economistas del Fondo presupone una aceleración del ajuste fiscal: la obra pública y los subsidios a la energía y el transporte serían donde el Gobierno podría seguir avanzando con los recortes. Aunque el costo político y social será elevado.
  Como es habitual, el Fondo Monetario no establecerá metas de tipo de cambio. Pero todo indica que Washington no autorizará desembolsos para el Banco Central defienda un tipo de cambio en estos niveles, para financiar la fuga de capitales, las compras para el colchón o los viajes baratos a Miami. El mercado cambiario está muy desbalanceado, con una demanda que supera holgadamente a la oferta, aún con tasas de interés en pesos superiores al 40%. Sin los dólares que traía el Estado vía emisión de deuda pública, ni los dólares de los especuladores que se colocaban en las Lebacs, la tendencia de la cotización seguiría subiendo.